5 consejos que debes seguir para el cuidado de tu jardín en invierno
La rutina usual para trabajar el patio y las plantas, todo lo que ello involucra, debe tomar un vuelco en los meses más fríos del año para su mejor protección.

Las bajas temperaturas no sólo nos obligan a adaptarnos en los hogares, sino también fuera de ellos. La rutina usual para trabajar el patio y las plantas, todo lo que ello involucra, debe tomar un vuelco en los meses más fríos del año para su mejor protección.
Sin duda el volumen de trabajo de jardín baja durante las épocas más frías. Esta “pausa” de las plantas permite enfocarse en otras tareas del espacio externo de la casa. Hay tratamientos habituales en los que puedes comenzar a mantener su flora durante los meses previos a la primavera.
En este sentido, el invierno es una gran oportunidad para poder ponerse al día con pendientes de mantención: acá los consejos para que sepas qué pasos dar.
Aliados rebeldes
Una de las recomendaciones que puedes seguir para cuidar tu jardín, es que, al momento de elegir una planta, elijas aquellas que son más resistentes al frío. Es importante saber qué estación corresponde para su crecimiento, así podrá verse y mantenerse bien siempre.
Lo ideal en este caso es elegir plantas rebeldes al frío. Todas aquellas flores o árboles u otros que no se quiebren o queman con facilidad ante las bajas temperaturas. Si no, habrá constantemente una posibilidad de plantas muertas u otros que afectarán el entorno.
“Durante el invierno, las plantas se sumergen en una especie de periodo de letargo, lo que permite que sea el periodo perfecto para remodelar el patio”, cuentan los expertos de Reggia, en donde trabajan con productos de interiores y hogar.
Esto se debe a que las hojas desnudas y el escaso movimiento de savia representa esta “pausa” de las plantas, lo que facilita labores, en especial cuando se trata de árboles: es la época en la que se puede visualizar sus dimensiones reales.
Tiempo de recambio
Durante el invierno, debes comenzar podando para dar el inicio a las obras de jardín. Árboles, arbustos y flores son más propicios a podarse durante otoño e invierno, lo que estimula el crecimiento de las mismas plantas previo a su crecimiento en primavera.
Aún mejor: si ya las podaste a comienzos de otoño, podrán haber sido menos afectadas por el frío. De todos modos, es importante retocar este punto cada cierto tiempo.
La mejor oportunidad para la tierra
Es ahora cuando tienes el terreno dispuesto para comenzar a nutrirlo. De a poco se acercará la fecha de siembra, y la cosecha o crecimiento de plantas, pasto, frutos, lo que sea – será aún mejor si es que comienzas a abonar y cuidar meses antes.
Cuidar la tierra permite a las plantas tener más nutrientes y fortalecer troncos y raíces. Además, parte del proceso es revisar sistemas de riego, para la mantención del riego y cuidar a las raíces.
No te olvides del pasto
En cuanto al césped, las bajas temperaturas lo afectan sobremanera. La humedad contribuye a su decaimiento y es necesario oxigenar el suelo para que sobreviva.
¿Cómo se hace esto? Debes hacer agujeros en la tierra, e integrar fertilizante ─puedes asesorarte con quien estimes conveniente.
Es necesario que revises siempre los productos, que sean naturales, para tu tipo de tierra y la época del año en la que los utilizas. Sólo así lograrás tener un jardín de ensueños.