Cuando alguien se compra una casa y comienza a habitarla es común escucharle observaciones como: “sería ideal que esta ventana estuviese en otro lugar donde llegara más luz”, “la aislación no es la adecuada para este clima”, “necesitaríamos otro dormitorio”, “no hay espacio para la lavadora”, “un baño es muy poco” o “los pasillos son muy angostos”, sólo por nombrar algunos comentarios.
Piensa un momento ahora en que tienes la posibilidad de construir una casa a tu gusto y conveniencia, donde todo se ajusta a tus necesidades, donde cada espacio está pensado en sus integrantes, en lo que quieren y disfrutan, en un tiempo acotado y por un valor razonable. Parece un sueño, pero no lo es. De hecho, contratar una empresa para que personalice casas modulares es una tendencia inmobiliaria que está creciendo con fuerza en Chile.
Tomar este camino no siempre significa invertir un poco más de dinero, la experiencia indica que tendrás un rápido retorno, una vez que termines el proyecto. Partiendo de esta base, analizaremos por qué las casas prefabricadas sí pueden adecuarse a tus gustos personales y hacer de esta inversión un buen negocio.
Consideraciones al optar por casas prefabricadas
Tiempo y costos
En esta etapa de avance de nuestro proyecto, es bueno recordar que, al optar por casas prefabricadas de madera de producción nacional, ahorraremos en tiempo y valores de construcción. Esto debido a que además de crear nuestro hogar, conoceremos el costo de gran parte de los materiales a utilizar en su primera fase. También podemos seleccionar la opción “llave en mano”, la cual implica conocer todos los costos de antemano hasta recibir la casa operativa.
Si optamos por este estilo de construcción, lo ideal es considerar a lo menos tres empresas diferentes y entregar a los responsables la cifra que tenemos disponible para este fin. Es fundamental explicar en detalle lo que necesitaremos en cuanto a la distribución de los espacios, cantidad de dormitorios, baños, estilo de cocina, entre otros. Además, informaremos a quien nos atienda nuestra elección de materiales o estilo, y lo que esperamos del resultado final de la vivienda. Una vez conocido un anteproyecto y teniendo la seguridad que la construcción está dentro de nuestras posibilidades, afinaremos detalles, siempre con la supervisión y ayuda de un profesional.
Casas VAL, un referente local
Una de las empresas con mayor prestigio a nivel nacional en este rubro es Casas VAL, una organización experta en casas prefabricadas que posee más de 20 años de trayectoria y realiza proyectos personalizados para privados y empresas, con fines habitacionales, en la mayoría de los casos, pero también para otros objetivos como laboratorios, box de atenciones, clínicas veterinarias, entre otros.
Francisca Ansaldi, una de las dueñas de la empresa, explica que la gran ventaja que ofrecen en casas prefabricadas en Chile es que no fabrican stock, sino que cada vivienda se fabrica con nombre y apellido, apegándose a las necesidades de sus clientes. “Puedes realizar cambios en casas de veinte metros cuadrados en adelante, desarrollar tu proyecto, guiarte hasta el nivel de construcción que quieras llegar y manejar tu presupuesto en todas las etapas”, resalta.
Comenta que además en su empresa puedes elegir desde el lugar donde construirás la casa y los sectores con mayor protagonismo, hasta el color del piso, tamaño y ubicación de ventanas. Esto implica también utilizar los materiales más adecuados según la localización del terreno, manejar presupuesto de acuerdo a las propias prioridades, ajustar la forma de la casa prefabricada e incluir todos los detalles hasta que quedes feliz y puedas dedicarte a disfrutar de tu hogar viviendo solo, o en compañía de tu familia y mascotas.
Recuerda que una casa no es una simple inversión. Es tu hogar y tu sueño.